Cirugía renal conservadora laparoscópica. En busca de un nuevo estándar quirúrgico
Resumen
Introducción: La cirugía renal conservadora laparoscópica para el tratamiento
de los tumores renales se encuentra aceptada en la actualidad, ya
que los resultados oncológicos son comparables a los de la nefrectomía
radical para el mismo estadio tumoral. A fines del año 2006, comenzamos
a aplicar esta técnica en pacientes con masas renales igual y/o menores
a 7 cm (T1 según clasificación TNM 2002).
El objetivo es mostrar nuestra experiencia inicial en cirugía renal conservadora
laparoscópica en la patología tumoral renal y analizar los resultados
quirúrgicos y postquirúrgicos obtenidos.
Material y métodos: De octubre del 2006 hasta setiembre del 2010, inclusive,
fueron realizadas en el Sanatorio Parque de Rosario 72 cirugías
renales conservadoras laparoscópicas con diagnóstico preoperatorio de
masa renal sólida estadio T1. Las técnicas utilizadas fueron tumorectomía,
enucleación extracapsular y nefrectomía parcial laparoscópicas según
las características de la lesión. El acceso utilizado fue retroperitoneal
en tumores de valva posterior, y en paciente con cicatrices abdominales
previas; en el resto de los pacientes el acceso fue transperitoneal. Como
técnica de hemostasia se utilizó en el lecho renal parches de celulosa
oxidada (SurgicelMR) y/o esponja hemostática (SpongostanR) con técnica
de hem-o-lok.
Resultados: La edad promedio de los pacientes fue 52 años (r: 26-72). 44
(61%) hombres y 28 (39%) mujeres. 8 (11%) fueron pacientes monorrenos.
El tamaño tumoral promedio medido por tomografía fue de 2,7 cm (r:
1,2-6). El tiempo operatorio promedio fue de 90 minutos (r: 60-210) y el
sangrado fue de 300 cc (r: 50-1000). En 16 (22%) pacientes la cirugía se
desarrolló sin isquemia (clampeo vascular). En los 56 (78%) pacientes
restantes se clampeó el pedículo renal con un tiempo promedio de isquemia
renal de 30 minutos (r: 20-45). El tiempo de hospitalización promedio
fue de 40 horas (r: 24-76 horas). La función renal se mantuvo estable
salvo en un paciente con insuficiencia renal crónica previa. La anatomía
patológica confirmó carcinoma renal en 65 (90%) casos, 5 (7%) oncocitomas,
1 (1,5%) fibroma renal solitario y 1 (1,5%) angiomiolipoma. Hubo 6
(8%) complicaciones postoperatorias. Todos los pacientes con diagnóstico
de hipernefroma se encuentran libres de enfermedad con un promedio de
seguimiento de 32 meses (r: 2-48).
Conclusión: La cirugía renal conservadora laparoscópica para tumores T1
es un procedimiento factible y reproducible. Permite la resección oncológica
segura con los beneficios de la cirugía de mínima invasión.
de los tumores renales se encuentra aceptada en la actualidad, ya
que los resultados oncológicos son comparables a los de la nefrectomía
radical para el mismo estadio tumoral. A fines del año 2006, comenzamos
a aplicar esta técnica en pacientes con masas renales igual y/o menores
a 7 cm (T1 según clasificación TNM 2002).
El objetivo es mostrar nuestra experiencia inicial en cirugía renal conservadora
laparoscópica en la patología tumoral renal y analizar los resultados
quirúrgicos y postquirúrgicos obtenidos.
Material y métodos: De octubre del 2006 hasta setiembre del 2010, inclusive,
fueron realizadas en el Sanatorio Parque de Rosario 72 cirugías
renales conservadoras laparoscópicas con diagnóstico preoperatorio de
masa renal sólida estadio T1. Las técnicas utilizadas fueron tumorectomía,
enucleación extracapsular y nefrectomía parcial laparoscópicas según
las características de la lesión. El acceso utilizado fue retroperitoneal
en tumores de valva posterior, y en paciente con cicatrices abdominales
previas; en el resto de los pacientes el acceso fue transperitoneal. Como
técnica de hemostasia se utilizó en el lecho renal parches de celulosa
oxidada (SurgicelMR) y/o esponja hemostática (SpongostanR) con técnica
de hem-o-lok.
Resultados: La edad promedio de los pacientes fue 52 años (r: 26-72). 44
(61%) hombres y 28 (39%) mujeres. 8 (11%) fueron pacientes monorrenos.
El tamaño tumoral promedio medido por tomografía fue de 2,7 cm (r:
1,2-6). El tiempo operatorio promedio fue de 90 minutos (r: 60-210) y el
sangrado fue de 300 cc (r: 50-1000). En 16 (22%) pacientes la cirugía se
desarrolló sin isquemia (clampeo vascular). En los 56 (78%) pacientes
restantes se clampeó el pedículo renal con un tiempo promedio de isquemia
renal de 30 minutos (r: 20-45). El tiempo de hospitalización promedio
fue de 40 horas (r: 24-76 horas). La función renal se mantuvo estable
salvo en un paciente con insuficiencia renal crónica previa. La anatomía
patológica confirmó carcinoma renal en 65 (90%) casos, 5 (7%) oncocitomas,
1 (1,5%) fibroma renal solitario y 1 (1,5%) angiomiolipoma. Hubo 6
(8%) complicaciones postoperatorias. Todos los pacientes con diagnóstico
de hipernefroma se encuentran libres de enfermedad con un promedio de
seguimiento de 32 meses (r: 2-48).
Conclusión: La cirugía renal conservadora laparoscópica para tumores T1
es un procedimiento factible y reproducible. Permite la resección oncológica
segura con los beneficios de la cirugía de mínima invasión.
Palabras clave
Nefrectomía parcial laparoscópica; tumor renal; técnica quirúrgica